Cómo curar un tatuaje recién hecho

Como curar un tatuaje recién hecho

Si hace poco que nos hemos realizado un tatuaje es importante seguir una serie de pasos para curarlo como es debido y poder lucir la belleza del mismo en poco tiempo.

Independientemente de las dimensiones o colores que tenga nuestro tatuaje, lo curaremos de igual manera, siempre teniendo en cuenta las particularidades de nuestra piel. Es muy importante mantener una higiene adecuada, en la primera semana la higiene ha de ser mucho más rigurosa para evitar cualquier tipo de infección o hinchazón innecesaria. 

Es vital seguir los consejos de curación de nuestro tatuador, que es quien nos sabrá guiar y decir cómo debemos cuidar nuestro tatuaje en las próximas semanas, sobre todo en la primera que es dónde debemos de poner mucho más empeño y cuidados. Es importante tener claro que un tatuaje no deja de ser una herida abierta y que como tal hay que tratarla con cuidado.

Pasadas las 2 o 24 horas de la realización de nuestro tatuaje, nos quitaremos el film con el que nuestro tatuador nos lo ha cubierto. En primer lugar debemos de lavar bien nuestro tatuaje, tres veces al día con un jabón cuyo PH sea neutro. Una vez lo hayamos lavado bien, sin presionar ni rascar, lo secaremos con una toalla limpia o mejor aún, con papel. Cuando la zona este limpia y seca debemos aplicar una capa de crema cicatrizante, en cualquier farmacia podrás encontrar una crema para tatuajes, personalmente os recomiendo Bephantol, si podéis evitar otras marcas como Urgo Tattoo mucho mejor (es una crema demasiado líquida y a mi personalmente no me ha ido bien), pero todo depende de vuestro tipo de piel.

En segundo lugar, una ve hayamos lavado y aplicado la crema cicatrizante sobre nuestro tattoo, los primeros días e incluso la primera semana, es esencial llevarlo cubierto con un apósito o gasa. El llevarlo cubierto es sobre todo en aquellos tatuajes que han sido realizados sobre zonas en las que se puede rozar con la ropa, de esta manera evitaremos la pérdida de crema o rozaduras. Si el tatuaje se ha hecho en zonas en las que no se va a ejercer ninguna presión o rozadura es conveniente aplicar la crema y dejarlo sin cubrir para favorecer a una cicatrización más rápida.

En tercer lugar, en los tatuajes en los que puedan ser rozados con ropa como son en la cadera, pierna, pecho, etc. es importante cubrirlos como ya hemos dicho y no ponerse ropa demasiado ajustada.

En cuarto lugar debemos de tener en cuenta que no podemos exponer el tatuaje, bajo ningún concepto, al sol al menos no hasta que haya trascurrido un mes aproximadamente desde la realización del mismo. Al igual que debemos evitar sumergirlo en agua con productos agresivos o con sal como son el mar o las piscinas.

Como último consejo de cómo cuidar un tatuaje, os aconsejo que, aunque sintáis picor NO OS RASQUÉIS, aliviar el picor con agua o rascando suavemente la zona de alrededor. En los tatuajes que se han hecho en zonas articulatorias como en bazos, piernas o espalda es importante no realizar ejercicio durante los primeros días al igual que evitar golpes, ya que puede agrietar nuestra piel.

La belleza de un tatuaje se basa no solo en el diseño que éste pueda tener sino también en el cuidado con el que lo curas, un tatuaje bien curado siempre lucirá mucho mejor que si no lo hacemos. Es nuestra piel y por lo tanto debemos hidratarla como es debido para evitar que ésta se dañe.